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Un altavoz PA activo es un altavoz diseñado especialmente para sistemas de sonido público (sistemas PA), que incorpora su propio amplificador interno. Por lo tanto, no necesitas un amplificador externo para amplificar la señal, como sí sucede con los altavoces pasivos. En pocas palabras: conectas el altavoz PA activo a una fuente de alimentación y a tu fuente de sonido (como una mesa de mezclas o un reproductor de música), ¡y listo! Esto facilita y agiliza el montaje y transporte, ya que se necesita menos equipo y menos cables. Estos altavoces son muy populares entre músicos, DJs y técnicos de eventos porque son fáciles de manejar en todo tipo de situaciones.
Los altavoces activos son sistemas de sonido completos con amplificador integrado, ideales para eventos versátiles. Combinan woofers para graves y tweeters para agudos en un mismo recinto, y a veces también incorporan altavoces de rango medio para una cobertura sonora completa. Un crossover interno distribuye la señal de forma precisa entre los distintos altavoces. Su carcasa robusta optimiza el sonido y reduce las resonancias. También incluyen una fuente de alimentación integrada, conexiones para diferentes fuentes de audio (XLR, jack, RCA) y a menudo también USB o Bluetooth.
Los controles permiten ajustar fácilmente el volumen y el sonido, y los circuitos de protección evitan daños por sobrecarga o sobrecalentamiento. Así, un altavoz activo es un dispositivo todo en uno que ofrece un sonido potente y claro para todo tipo de eventos.
Los altavoces PA activos son muy versátiles y pueden usarse en casi cualquier situación donde se requiera un sonido potente y claro. Es importante adaptar el rendimiento y el tamaño de los altavoces al tamaño del evento y la acústica del lugar. Son adecuados para una amplia gama de eventos. Aquí algunos ejemplos:
Los altavoces activos, que ya tienen un amplificador incorporado, no requieren cableado externo entre amplificador y altavoz. En esta configuración, la conexión está integrada y preinstalada. Los usuarios solo tienen que conectar un cable entre el altavoz activo y la fuente de sonido, como una mesa de mezclas. Para ello, se utiliza comúnmente un cable con conectores XLR en ambos extremos o un cable de instrumento jack de 6,3 mm (no un cable de altavoz).
Esta distinción es crucial para una instalación adecuada y para garantizar el rendimiento óptimo del sistema de sonido, ya que elegir el tipo de cable correcto asegura la mejor calidad de audio.