El Roland Verselab MV-1 (negro ) es la solución perfecta para todos los músicos ambiciosos que consideran que un estudio de grabación completo requiere demasiado tiempo y que un ordenador de estudio profesional es demasiado caro. El compacto "todo en uno" ofrece un potente secuenciador de 8 pistas, integración de muestras, la última síntesis ZEN-Core (con más de 3.000 sonidos a bordo) y puede dar sabor a un micrófono conectado con efectos modernos.
Funcionamiento intuitivo
La Verselab está optimizada para un buen flujo de trabajo. Numerosos controles conducen directamente a secciones y funciones dedicadas. Los 16 pads multicolores sensibles a la velocidad y el secuenciador TR son las principales opciones para grabar ritmos y melodías. Si no son suficientes, también se puede conectar un teclado MIDI. Además, es posible intervenir más profundamente en los procesos creativos a través del Smartphone o la Tablet mediante la aplicación ZenCore, disponible de forma gratuita.
Sonidos, muestreo y voces
La generación de sonido de última generación de la MV-1 se basa en el motor de sonido ZEN-Core y permite una profunda edición de sonido con una polifonía de voz de hasta 128x. Hay disponibles más de 3000x sonidos profesionales y más de 80x kits de batería, ofreciendo algo para casi todos los gustos. Todos los sonidos pueden recibir retardo, coro, reverberación y multiefectos gracias al potente procesador de efectos. Los cambios de sonido detallados y la organización de los sonidos también se pueden llevar a cabo con la aplicación ZEN-Core y, por supuesto, en el propio dispositivo. También es posible muestrear un ritmo de un reproductor de CD conectado, por ejemplo, y procesarlo en su propia canción. Una de las pistas está destinada a las voces, se pueden grabar y arreglar varias tomas. Si necesita hacerlo rápidamente, puede utilizar directamente el Micrófono Integrado, o bien puede conectar un Micrófono directamente al Verselab y grabar su propia Voz o una Guitarra Acústica y añadirle Efectos.
Conexiones
En la parte delantera, hay salidas de auriculares con conectores de 6,35 mm y 3,5 mm, lo que evita tener que buscar un adaptador adecuado en el momento. Un teclado maestro, por ejemplo, puede conectarse a la entrada MIDI, lo cual es una ventaja, especialmente cuando se tocan melodías y líneas de bajo. Como el secuenciador interno también emite notas MIDI, podrías controlar tu sintetizador favorito a través de la salida MIDI y muestrear directamente a través de la entrada de audio. El intercambio de datos se realiza a través de la tarjeta SD y el USB. Este último transmite no sólo datos de notas sino también pistas de audio. Así que si quieres trabajar con un amplio DAW, aquí tienes la interfaz adecuada.