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El contrabajo es el mayor instrumento de cuerda y está formado por cinco componentes clave: la caja, el mástil, la pica, el puente y el arco. La caja de resonancia hueca incluye un fondo curvado, aros laterales y una tapa armónica. El puente se coloca en el centro de la tapa y transmite las vibraciones de las cuerdas al cuerpo. El mástil sostiene las cuerdas, fijadas abajo con el cordal y arriba con las clavijas. La pica se apoya en el suelo y estabiliza el instrumento. El arco permite emitir sonido al frotar las cuerdas.
El contrabajo se afina tradicionalmente en cuartas, es decir, sus cuatro cuerdas están separadas por cinco semitonos. De la más grave a la más aguda, la afinación estándar es Mi - La - Re - Sol. Algunos contrabajos tienen cinco cuerdas, con una cuerda adicional afinada en Do o Si grave. El ajuste de afinación se realiza girando las clavijas del clavijero.
Elegir un contrabajo requiere considerar varios factores. Lo más importante es la calidad de la madera, que influye directamente en el sonido. Los modelos de madera maciza ofrecen un sonido más rico que los laminados. También es clave elegir el tamaño adecuado: principiantes y niños suelen empezar con 1/4 o 1/2, mientras que músicos avanzados usan 3/4 o 4/4. La comodidad también es importante. Además, asegúrate de que las cuerdas y el arco sean de buena calidad. Por último, define un presupuesto: hay opciones asequibles con buen sonido y acabado.
